MI PRIMER MES
Se inicia la aventura más grande de atender a nuestro bebé, es la mejor de las motivaciones apoyarlo, alimentarlo, cuidarlo, protegerlo, ser oportuno con sus vacunas, tamiz del talón y auditivo y visita al Pediatra.
Aprende a vivir cada una de sus etapas, que es diferente entre si cada una de ellas, no te apresures, vive su momento pleno en felicidad, no te cuestiones tanto y mantente alejado de pronósticos sombríos sobre el futuro, que si hará esto o aquello, no te desgastes con estas preguntas, lo mejor es vivir cada una de sus etapas para sintirse orgullosos de su SALUD. Tu bebé, te irá mostrando lo mejor de él o ella, ten calma ¡ESPERA!, el tiempo te irá marcando cada nueva habilidad que presente.
En este mes, sus movimientos no son coordinados, pero a medida que comience a desarrollar más habilidades físicas, sus movimientos podrás apreciarlos con excelente coordinación.
Coloca tus ojos enfrente del bebé, desde muy temprano los empiezan a mover, aunque solo ven a 30 cm. pero eso es suficiente para que mueva sus ojos para iniciar el reconocimiento de tu cara, además, es capaz de dirigir la mirada hacia sonidos y voces familiares.
El control del cuello es débil, debes protegerlo al momento de tomarlo en brazos, no obstante los recién nacidos pueden mover la cabeza hacia un lado, lo cual es muy ostensible ante su Reflejo de búsqueda, pudiendo girar su cabeza hacia el pezón.
Mediante este Reflejo de búsqueda se encamina a la fuente divina del néctar del seno materno, una vez iniciada la succión, para establecer contigo el vínculo amoroso afectivo Madre-Hijo, que ha de perdurar en su tierno cerebro en Confianza, Seguridad e Integridad, desde este momento, hasta su vida de adulto.
Con mi llantito, te estoy diciendo que algo necesito!
Regocíjate con mis Grandes Proezas!
FEPENORO: Siempre con la Familia.