OÍDO
Órgano sensorial muy activo, que desde recién nacido está en alerta constante, recibiendo estímulos sonoros que le ayudan a tener gran confort y tranquilidad.
Son las voces de papás y familiares las que representan su máxima seguridad.
Nuestro OÍDO distingue cada ruido gracias a sus receptores, que de manera rápida e inmediata nos indica y orienta de que se trata. Es un registro que queda grabado en nuestro cerebro para toda la vida, en tratándose del ruido del carro de papá cuando llega a casa, hay miles de carros, pero el bebé sabe, que es el de papá.
La noche tranquila discurre y nuestro cuerpo descansa y duerme, pero nuestro sentido sensorial, el OÍDO es muy sensible, está en permanente guardia, es una ALARMA DE 24 HORAS, y si se presenta un ruido amenazante, que no corresponde al cotidiano, es que hay PELIGRO, al instante nos despierta, siendo nuestro deber averiguar de que se trata, es la seguridad de nuestro cuerpo y de nuestra Familia: Todo gracias a nuestro Oído.
Reclama tanto CUIDADO, ya que es responsable del 90% de los estímulos exteriores que recibimos, esto lo coloca en un ÓRGANO SENSORIAL DE GRAN VALOR.
Contar con una audición normal, permite que el pensamiento sea claro y maduro, ya después se suma el lenguaje, entrambos impulsan el desarrollo del conocimiento.
El OÍDO es la base para el buen desarrollo del lenguaje.
Un sistema fantástico que percibe un rango de sonidos. La voz que escuchamos la reconocemos enseguida, pero el tono de voz de una persona por vez primera, aunque no la reconocemos, nuestro oído emite un pronóstico de como puede ser esa persona, si tu OÍDO te alertó al instante de posible riesgo, hazle caso.
CUIDA TU OIDO, ES UNA MARAVILLA PODER OIR.
RUIDOS Y VOLUMEN ALTO, LO LASTIMAN: EVÍTALOS.
FEPENORO: Siempre con la Familia.