DISLEXIA
La dislexia es un trastorno en la lectura o en la escritura que se da en niños con buena capacidad para aprender, en un entorno bien estimulado.
Se presenta hasta en el 5% de la población escolar.
La sospecha inicial es en la familia o escuela, si la sospecha está presente debe darse valoración por psicología.
La evaluación se realiza por medio de pruebas estandarizadas que verifiquen dicho trastorno.
Señales de alerta
La dificultad y la lentitud en la lectura y en la escritura pueden ser habituales. No obstante, los siguientes datos deben alertar de la necesidad de consultar.
- Al escribir invierte las letras o los números (hace los giros al revés), y sigue haciéndolo un año después de haberlos aprendido antes.
- Cambia el orden de las letras, especialmente con algunas sílabas (con las letras “l” o “r”), por ejemplo: en lugar de escribir “globo” pone “golbo”, “palta” en vez de “planta”.
- Omite alguna letra de la palabra, por ejemplo, en lugar de “árbol”, escribe “arbo”.
- Al escribir frases, une algunas palabras. Por ejemplo: “la casa roja esdeMaría”.
- Cuando a la hora de leer se repiten algunos de estos errores de adición, omisión o inversión.
Si alguno de los padres ha tenido este trastorno, la probabilidad de padecer dislexia de sus hijos es mayor que en la población general. Alrededor del 60% de los niños disléxicos tienen un progenitor también disléxico.
Tratamiento
Aunque la dislexia tiene su origen en una disfunción cerebral, la reeducación permite mejorar y corregir muchos de estos errores. Cuanto antes se inicie el tratamiento mejor pronóstico tendrá. Se inicia el manejo por psicólogos, debiendo reeducar a los padres quienes tienen también un importante papel en casa.
En ocasiones, estos problemas se pueden observar en niños que presentan otros problemas, como déficit de atención o problemas del desarrollo o del aprendizaje en general, por lo que puede ser necesario llevar a cabo una valoración clínica.
Ayuda en casa
Dado que estos niños tienen dificultades escolares es necesario potenciar su autoestima, haciéndoles partícipes de sus avances y logros sin enfados ni presiones.
Con frecuencia sienten rechazo por los deberes o las tareas de lectura y escritura, por lo que es aconsejable buscar juegos o métodos interactivos.
El color de las imágenes y la música, además de la autocorrección, sirven para mejorar la actitud y disposición, y por tanto contribuyen a la mejoría de la dislexia.
ENTRE MÁS TEMPRANO LO SEPAMOS, EL PRONÓSTICO ES MÁS FAVORABLE.
ES REEDUCAR, SIN PRESIONES AL LADO DEL PERSONAL DE PSICOLOGÍA.